Iban los dos hablando de hacer a Sancho Panza gobernador de una ínsula, cuando vieron un molino.
Entonces, Don Quijote lo confundió con un gigante y fue corriendo para atacarlo. Como no era un gigante si no un molino, se le enganchó la lanza y se rompió. y Sancho le ayudo.
Nunca el Quijote fue tan divertido como con vosotros.
ResponderEliminarLa historia de Don Quijote me parece todavía más entretenida desde que nos la contáis vosotr@s!
ResponderEliminarEsperamos el siguiente capítulo.
Gracias chic@s!!!
Muy bien chic@s sois los mejores nos estáis enseñando muchas cosas
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